Es penoso darse una vuelta por el campo y ver como la agricultura industrial va ganando terreno tanto a la ecológica como a la tradicional. Y es penoso porque esta forma de cultivar la tierra exquilma sus recursos, envenena tierras y agua, aniquila muchas formas de vida, en definitiva , no es sana. Al comienzo de esta primavera, y en uno de mis paseos buscando nuevas especies, me detuve en una porción de tierra sin cultivar con algunos "chaparros" que guardaba en su interior una triste realidad : los envases vacíos de un herbicida a base de glifosato.
El glifosato es el ingrediente activo en muchos herbicidas comercializados en todo el mundo. Los herbicidas a base de glifosato son ampliamente utilizados para el control de malezas ya que no son selectivos; el glifosato elimina toda la vegetación. El glifosato puede tener un impacto directo en las plantas no-objetivo en los entornos donde es utilizado , a través del desvío de la pulverización o la sobrepulverización deliberada. Esto podría conducir a la pérdida de especies raras o en peligro de extinción, o una reducción general de la diversidad y la cantidad de especies.
Pero los peligros de este compuesto también afectan al hombre , incluido al agricultor que lo utiliza. En un informe de Greenpeace Argentina ( país seriamente afectado por el uso masivo de glifosato) titulado
" Tolerancia a herbicidas y cultivos transgénicos ", se pone de manifiesto que la exposición al glifosato está relacionada con problemas serios de salud como defectos en los niños de madres expuestas, es un disruptor endocrino, puede contribuir al cancer.
Si eres agricultor tienes, además de las razones expuestas, otra más para plantearte abandonar su uso :
el glifosato tiene un impacto en las funciones clave de la rizosfera ( la parte del suelo que rodea la planta).
Entre los efectos dañinos que pueden producir en tus cultivos están la reducción en la absorción de nutrientes, reducción en la fijación de nitrógeno, incremento en la vulnerabilidad de enfermedades
de las plantas.
Por todo esto y porque existen alternativas a su uso , no envenenemos nuestros campos con glifosato.
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