jueves, 22 de octubre de 2015

Quercus suber

Porte


El alcornoque es junto con la encina, uno de nuestros árboles más representativos. Se diferencia de ésta fundamentalmente por su corteza, sus hojas y sus requerimientos ecológicos ( más exigente en suelo y humedad el alcornoque).

Es un árbol que puede llegar a alcanzar los 20 metros, de corteza grisácea ( cuando aún no se le ha quitado la corcha, entonces se vuelve anaranjada ) suberosa, gruesa y agrietada. Las hojas son coriáceas, persistentes, ovalo-lanceoladas, con el haz verde y el envés blanquecino, menos denticulada que su pariente la encina. Las flores son unisexuales, aparecen sobre el mismo árbol y son poco vistosas. Las masculinas se reunen en amentos amarillentos y colgantes y las femeninas son solitarias o aparecen en pareja.



Flor
El fruto es una bellota cubierta en su parte inferior por una cúpula campanulada, más amarga que la de la encina. Su distribución es menos amplia que otras fagaceas ( encina, roble), estando la mayoría de sus poblaciones en el suroeste de la península ibérica. En la comarca de Mérida se ubican preferentemente en las laderas umbrosas de nuestras sierras, aunque hay excepciones como el conocido Prado de Lácara ,donde se haya un fabuloso ejemplo de alcornocal de llanura, gracias a la humedad edáfica que proporcionan los ríos y arroyos del lugar.

1 comentario:

joaquín dijo...

Me encanta el color de los alcornoques tras quitarles el corcho